La pandemia por el virus SARS-Cov-2 (Coronavirus) ha golpeado fuertemente al mundo entero, y en la batalla por su detección temprana y tratamiento oportuno existe un profesional de la salud que ha permanecido en el anonimato a pesar de su crucial labor durante estos meses de pandemia.
Mucho se ha escuchado hablar de los exámenes de PCR para la detección del Covid-19, procedimiento realizado en la mayoría de los casos por un Tecnólogo Médico de la especialidad de Laboratorio y Banco de Sangre, sin embargo, a pesar de que efectivamente este examen es el único procedimiento confirmatorio de la existencia del virus, la realidad nos ha mostrado que pueden existir falsos negativos, y en esos casos los exámenes de imágenes cobran real importancia, permitiendo a los Tecnólogos Médicos de Radiología y Física Médica detectar a tiempo a pacientes que con PCR negativa presentan hallazgos imagenológicos concordantes con COVID-19; una alerta fundamental que le pone freno a un posible nuevo foco de contagio.
“Un examen imagenológico que sea diagnóstico y con altos estándares de calidad independiente del estado de salud en el que se encuentre el paciente permitirá establecer la sospecha o no de una infección por COVID-19. Y en el caso de pacientes ya confirmados o que presenten complicaciones sugerentes, puede objetivar la extensión y severidad de estas”, explica el Tecnólogo Médico Daniel Olave, encargado de Unidad de Rayos X del CESFAM-SAR Padre Manuel Villaseca, de la comuna de Puente Alto y miembro de la Mesa Covid de Radiología y Física Médica del Colegio de Tecnólogos Médicos de Chile; quien agrega que en estos casos es una prioridad la capacidad del Tecnólogo Médico de “reconocer in situ hallazgos imagenológicos que puedan resultar dudosos”.
“El aporte directo del TM de Radiología en la detección y descripción de los hallazgos en conjunto con el médico tratante agilizará este proceso y permitirá no pasar por alto ningún detalle del examen”, advierte Olave, quien se declara convencido de que el rol del Tecnólogo Médico, especialista en imágenes, no puede limitarse a la realización de la radiografía, el profesional debe contribuir a mejorar la calidad en los procedimientos sanitarios. “Nuestra labor es resolutiva, permite agilizar y detectar a tiempo hallazgos imagenológicos que nos sugieren la presencia de COVID-19, más aún en aquellos pacientes que presentan complicaciones graves y requieren ser derivados en forma inmediata a centros de mayor complejidad”, aclara.
EN TIEMPOS DE CRISIS SURGEN OPORTUNIDADES
“La situación sanitaria del país a lo largo de esta pandemia ha estado marcada por la respuesta tardía y reactiva, en lugar de ser preventiva. Si consideramos que la pandemia se inició en el continente asiático en diciembre y luego se extendió por Europa, había mucho por aprender de sus experiencias y pese a ello no se hizo”, relata el especialista en Radiología y Física Médica, quien señala que –en cierta forma- la crisis sanitaria que atraviesa el país, ha dejado en evidencia la saturación del sistema y la escasez de especialistas, y en ese escenario es que los Tecnólogos Médicos se han visto forzados a demostrar sus capacidades. “En muchas instituciones los tecnólogos médicos somos partícipes en la toma de decisiones o consultores respecto a casos que involucran exámenes de imágenes, pero lo ideal es que esto no sea un caso en particular ni algo que se realice de manera informal, sino que algo que se masifique y para ello también recae en nosotros la responsabilidad de incorporar a nuestra formación profesional conocimiento que no se imparten en el pregrado, aunque eso implique salir de nuestra zona de confort”.
En esa misma línea, fue que el Colegio de Tecnólogos Médicos hizo un llamado abierto para participar de las Mesas Covid con el fin de ser un aporte real y activo en la lucha contra la pandemia; bajo estas instancias aparecieron temas de relevancia y en los cuales se está trabajando fuertemente. En el caso de la Mesa de Radiología y Física Médica, el categórico rol del TM ha sido una constante; al igual que el llamado de la Presidenta del Colegio de Tecnólogos Médicos, Edith Valenzuela, hacia los colegas de ser consciente de sus capacidades y ejercer en base a su tremendo potencial profesional y no quedarse sólo en la toma de imágenes.
Bajo la misma premisa es que el TM Daniel Olave insiste en que los Tecnólogos Médicos deben empoderarse de su rol, “comprender que tenemos los conocimientos científicos que nos permiten aportar al diagnóstico en forma directa, por lo que en lugares donde el acceso a Radiólogos es limitado, escaso o nulo, el que podamos elaborar un informe donde se describen los hallazgos del examen, permitiría aumentar la resolutividad y la disminución de eventos adversos o centinelas que ocurren cuando los exámenes son interpretados por profesionales, incluso por médicos que no poseen los conocimientos o competencias suficientes para realizar esta acción”, insiste el profesional, quien asume que si bien esto implica una mayor responsabilidad en la autoformación –considerando que muchos de estas herramientas no se adquieren en el pregrado sino que con la práctica- es clave ser capaces de ganarse ese espacio a través de una conducta proactiva.
CHILE Y EL COVID-19
En la actualidad, con más de 14 mil fallecidos entre confirmados con COVID-19 y los que aún no lo están, volver a la normalidad es un anhelo que se ve aún lejano. El comienzo del retorno seguro revela aglomeraciones en las ferias libres, transporte, en los espacios públicos y en variadas ocasiones se observa que las personas circulantes no respetan las medidas sanitarias básicas de prevención.
Realidad que, genera un alto grado de frustración en quienes se desempeñan en el área de la salud, y que durante meses han trabajado en extensos turnos laborales con el fin de salvar vidas y contener los contagios. Frente a este escenario, la Presidenta del gremio alerta sobre las consecuencias que puede traer el no respetar las medidas sanitarias en este proceso de desconfinamiento, “Es importante no cometer los mismos errores, tenemos nuevamente la experiencia de otros países, los que ya están siendo víctimas de rebrotes debido a la irresponsabilidad de los ciudadanos que no han sido capaces de respetar el paso a paso”.
La restructuración en los centros sanitarios, la extensión de turnos y la necesidad de mantenerse actualizados y capacitados son sólo algunos de los esfuerzos que los profesionales de la salud han tenido que incorporar en sus rutinas diarias, todo lo cual se empaña ante la evidencia de la falta de consciencia por parte de quienes aún no comprenden la gravedad de la situación.