Testimonio de una asociada por este tema, fue parte importante del encuentro.
Un interesante intercambio de opiniones se realizó este jueves 9 de agosto entre Tecnólogos Médicos de diversas especialidades y parte del Consejo Nacional en torno a los detalles y consecuencias que ocasiona el Decreto 90. Esto, tanto para la salud de la población, como para nuestro gremio.
Uno de los elementos que resaltó en la cita, fue la presencia de la T. M. Juana Zevallos, quien ha presenciado y vivido en carne propia los efectos de dicha disposición en el norte del país.
Al respecto, Juana Zevallos detalló su experiencia a este portal, "lo más grave en esto es la exposición innecesaria en exámenes mal tomados por técnicos que no tienen las bases, ni las competencias, por lo que actúan ignorando las áreas que nosotros como Tecnólogos Médicos manejamos. Nuestro conocimiento nos permite hacer los exámenes de acuerdo al diagnóstico, con las dosis correctas y sin irradiar injustificadamente, porque el afectado siempre termina siendo el paciente".
CASOS GRAVES
La profesional comentó uno de los casos más fuertes que vivió "En Atacama conocí el caso de una bebé con una patología renal, tenía un solo riñón. Al momento de practicarle la radiografía de los tres meses, ésta se la efectuó una Auxiliar de Rayos, quien la irradió ocho veces! Lamentablemente y - pese a que yo lo hice ver a mis jefes -, la mamá de la niña solo lo informó de manera verbal y no escrita. Entonces las autoridades del hospital no hicieron nada ".
Pero eso no es todo, porque Juana Zevallos alude a una situación que descubrió recientemente "en marzo de este 2018, descubrí que en el Hospital Comunitario de Mejillones había un Auxiliar de Aseo realizando exámenes hace varios años. Esto me pareció muy irresponsable y así se lo dije a mi jefatura por el peligro que esto significaba para los pacientes. Pero otra vez no se me escuchó y nada ocurrió. De hecho, ese recinto hospitalario sigue recurriendo a personal no calificado para practicar los exámenes".
COSTOS POR DENUNCIAR
Más allá de los evidentes riesgos de la salud de los ciudadanos ante estas malas prácticas, le consultamos por las consecuencias que ha debido enfrentar por acusar estas situaciones, Juana Zevallos indicó, "bueno, los costos han sido muy determinantes y fuertes. Perdí mis trabajos por defender la verdad, por sostener mi ética profesional, por negarme a capacitar a auxiliares o técnicos. Por plantear estos hechos directamente a mis superiores, me ha costado el cargo de manera sucesiva".
Así las cosas, el Colegio de Tecnólogos Médicos seguirá desplegando acciones para luchar por la derogación del controvertido Decreto 90.