A las 12 semanas detectó que el feto venía con una malformación cardiaca que, por conjugarse con síndrome de down, era inoperable. Aunque múltiples informes médicos aseguraban que podía acogerse a la ley de aborto, el staff del HOSCAR determinó no interrumpir el embarazo cuando cumplió las 24 semanas.
SANTIAGO.- Sobre una mesa pequeña, Candy Jamett (40) empieza a extender los documentos y boletas que lleva archivados en una carpeta azul, dentro de una bolsa de género negra. Por su trabajo —perito química del laboratorio de Iquique de la Policía de Investigaciones— está acostumbrada, dice, a hacerlo así. "Soy organizada", afirma, con las manos en aquellos papeles que describen una ruta difícil de resumir: la que empezó a transitar a comienzos de enero, cuando cumplió 12 semanas de embarazo.